Cómo elegir la carpintería exterior para conseguir un hogar eficiente

por | Oct 13, 2021 | Ahorro energético, Casas pasivas, Materiales

Fachada principal del showroom de construccion.bio en Colmenarejo, Madrid.

Como ya hemos comentado en varias ocasiones, una casa pasiva es una vivienda que tiene un consumo energético realmente bajo. Esto se consigue diseñando el edificio de acuerdo a una serie de criterios técnicos y constructivos que permiten aprovechar al máximo la energía del sol durante los meses de invierno, mientras que en los meses de verano evitaremos la entrada del sol en la vivienda. El alto nivel de aislamiento de los materiales utilizados unidos a una gran hermeticidad e instalaciones de bajo consumo logran la máxima eficiencia energética.

Suelo de antracita
Sistema de climatización a través del suelo

Las ventanas de última generación: la clave fundamental

Todos los elementos aislantes, desde los muros hasta el tejado hasta las puertas y ventanas, juegan un papel fundamental en la mejora de la eficiencia energética en un hogar. Sin embargo, de todos ellos, son las ventanas las que adoptan un rol más destacado, pues a través de ellas se gestiona la entrada de luz.

Sin embargo, no cualquier ventana que aisle bien servirá como para que una casa sea pasiva. Las especificaciones de las ventanas y puertas acristaladas al exterior que están dentro de esta categoría son muy rigurosas y exigentes. Así, para que una ventana esté categorizada como Passivhaus, necesita tener un coeficiente de transmitancia térmica global igual o inferior a 0,85W/m²K para las instaladas en el muro.

A la hora de analizar las ventanas Passivhaus es necesario hacerlo también con sus componentes. Por ejemplo, el acristalamiento debe contar con al menos dos vidrios (aunque se suele recomendar 3) y estos vidrios deben ser los adecuados para la zona climática en la que está ubicada la vivienda y la orientación.

Ventanal luminoso orientación eficiente

Por otra parte, hay que tener en cuenta que mientras en las ventanas convencionales se utilizan separadores de aluminio o acero inoxidable, en las ventanas Passivhaus se instalan separadores térmicos de alta calidad que no tengan una tasa de transmitancia térmica tan alta como la de estos dos materiales. 

Además, otro de los requisitos de una ventana de estas características es contar con una cámara de aire que debe estar rellena de un gas noble, por ejemplo de argón, pudiendo reducir aún más la permeabilidad térmica que el aire normal. De igual modo, el material utilizado en el perfil (pvc, madera, etc.) tiene que ser realmente aislante además de estar muy bien sellado.

Finalmente, las ventanas Passivhaus deben estar perfectamente instaladas en el muro del edificio para lo que se utilizan membranas y sellamientos específicos para evitar los puentes térmicos uniendo las distintas capas de hermeticidad.

GRANDES VENTANALES: ESTÉTICA Y EFICIENCIA DE LA MANO

Un gran ventanal además de ser muy decorativo, práctico y confortable es mucho más aislante que una ventana más pequeña. Esto es porque tiene mayor superficie de cristal que, al ser triple con doble cámara de gas consigue mayor nivel de aislamiento que el marco. Al tener una superficie de cristal proporcionalmente mayor al perfil la transmitancia es más baja. Por ejemplo, en una corredera elevable se puede llegar a una transmitancia de 0,70W/m²K o menos, en lugar de los 0,85W/m²K o más en una ventana más pequeña.

Con todo lo que hemos visto, lejos de pensar que unos grandes ventanales son una fuente de pérdida de energía, con los materiales y técnicas que se usan en una casa pasiva, conseguimos precisamente que sean una importante fuente de ahorro en el hogar.

Bioconstruyamos!
Jorge Martín gerente de construccion.bio

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